miércoles, 30 de enero de 2008

Vivito y Latiendo mi Capullito

Eso me dijo el Doc Jhon Cornejo con una tremenda sonrisa.
Ahí está, vivito y coleando.
¿Quieres escucharle el corazón?
¿Se puede?
Claro!
Y subió el ecógrafo a archimega volumen y te pude oir...con el corazón latiendo y las lágrimas saltandome solas.
Vives, vives en apenas 1 cm de tu existencia en tu saquito de humedad de tres por tres...chiquitito.
Yo solo espero que sigas así aferradito a mi.

jueves, 10 de enero de 2008

Dos Rayitas



Y salieron dos rayitas Capulito, no tuve que esperar ni siquiera los 3 minutos porque aparecieron altiro.
¿Qué hacemos? Seguimos calladitos o empezamos a anunciarnos? Me da susto, claro, no sea que nos pase lo de la otra vez y me hagas de nuevo un Creo falso... aunque me late que esta vez será distinto, no me fluye la desesperación ni la angustia, ni la ansiedad ni la locura de gritarle a todo el mundo tu existencia.

Mucho menos por estos días en que esperamos la llegada de Cicciolino en cualquier momento.
Vamos a hacer eso, vamos a ir dejando que los minutos, las horas y los momentos sigan su curso en paz, algunos, claro, los más cercanos, se enterarán, ni modo, pero todo será en paz y tranquilidad, así, si vuelves a partir no nos dolerá tanto como la primera vez, no habrá lágrimas ni decepciones y lo entenderé como que de nuevo no era el momento.
Eso no significa que haya perdido la fe, tan solo que ahora te recibo entre mis pechos y mi vientre con cautela y devoción.

Por ahora nos concentraremos en Cicciolino que nos tiene a todos bastante ansiosos, nos dedicaremos a preparar la forma más linda de contarle a papá y a los Bachis y al resto de la familia. Me dedicaré a tomar lechita descremada y comer sanito para no volverme un mamut, nos dedicaremos a refugiarnos también en el cariño inconmesurable de nuestras hadas protectoras, me dedicaré a descansar de estos síntomas que me ponen en evidencia, me siento mal, me pesan los pechos , tengo mucho mucho sueño y ganas de absolutamente nada. De hecho de lo único que tengo ganas es de estar acostada y abrazada de papá oso.

¿Me abrazas Capullito? mmmm...que rico.

miércoles, 2 de enero de 2008

Shhhhhh


Vamos a quedarnos en silencio Capullito mío.
Así, solos tú y yo.
No como la otra vez que de la pura alegría disparamos sonrisas y lo gritamos a los cuatro vientos.
Siempre he pensado que Dios castiga esas imprudencias, eso de andar gritando las cosas y celebrando antes de tiempo.
Ahora lo sabremos solo tú y yo...y nadie más Capullito mío, Capullito amarillo de sonrisa rosada.
Y esperamos no más, en silencio, con paciencia y con prudencia que los días vayan pasando, que todos sigan pensando en la Navidad que recién pasó, en el Año nuevo con su Luz cortada, en el Volcán Llaima que hizo erupción ayer o en la muerte de Julito Martínez.
Así nadie se acuerda de nosotros, ni anda pensando que cuándo, que pucha, que ya po.
No lo vamos a permitir.
Si ya estás ahí de nuevo y te anidaste y estos pechos que comienzan a llenarse tienen que ver contigo entonces nos quedamos calladitos, así, escondidos y no le contamos a nadie.
No sea que la euforia apresure de nuevo una nueva partida, no sea que las miradas atentas o los abrazos anticipados te vuelvan a quitar de mi lado.
A ver si ahora nos resulta amor mío, a ver si esta vez te quedas a mi lado, a ver si esta vez te vuelves certeza, flor, aroma y latir en mi vientre mi pequeño y añorado Capullito.