¿Lo sientes?
Es cosa de respirar cortito primero y hondo después.
Llega Abril y el ámbito entero se llena de tu aroma.
Comienza el caer del otoño y al volverse todo dorado y hojas secas se aroma también el cielo de todo lo que eres...
Aroma de ángeles... todo huele a ellos, a apancito amasado con mantequilla de campo, a cogotito de queso, a patitas de malvavisco, todo canta sus nombres, todo el sol es ahora color celeste y rosado y blanco-nube.
Hoy por hoy soy toda entera tuya y viceversa, ando como en las nubes contagiándome de risa, cuidando el alimento, disfrutando de los pasos lentos y el sol tibio que se va enfriando de a poco.
¿Sabes que lo más lindo de esta tierra nuestra son las estaciones del año?
Es curioso, cuando un chileno vive fuera es lo que más extraña, es muy raro eso de vivir en países donde no se notan las estaciones.
Debe ser plano y fome que nunca sea Otoño y jamás invierno.
Nuestro verano es ardiente y sus noches maravillosas plagadas de estrellas y lunas que vienen e saludar desde distintas galaxias para admirar este cielo de Chile como no se puede admirar en ninguna otra parte del mundo.
Nuestra primavera es tibia y luminosa llena de prados reverdecidos y flores nacientes.
El invierno es el compañero gélido de lluvias y vientos, generalmente los poetas de esta tierra despiertan con más ganas en las tardes grises de nuestro invierno congelado (así les fluye la musa, dicen, yo no sé, jamás he intentado nada ni siquiera parecido a la poesía)
Y el Otoño...el Otoño es una maravilla que dora los atardeceres entre hojas secas y brisas frescas.
Yo te cuento para que lo sepas, para que planifiquemos este viaje que ha de comenzar en la próxima primavera cundo las flores me hablen de tu llegada y el cielo de volantines te celebre luminoso.
Te lo cuento para que ames esta Patria de granitos y hielos, de bosques y cordilleras nevadas. Es una maravilla.
Hoy por hoy todo me habla de ti, de ti, de ti y de nada más.
De una casa del castor que es jungla y hogar, de un papá Oso que baila en una pata y hace equilibrio porque anda contento, de otro par de animalitos que te preparan el nido jolgoriosos y sonrientes...porque nada puede ser más bello que esperarte.
Hoy por hoy no hay otro aroma que la promesa de verte a los ojos...Capullito de lana, de palotes de Kinder, de cotona sin chicote, de manzanas oxidadas en el fondo de la mochila, Capullito de todas las costuras de mi corazón, de queso, de papa frita, de membrillo, de amor.
sábado, 12 de abril de 2008
Todo huele a ti...Capullito
Te lo escribió Mamá
Claudia Castora